Ante la relajación de las medidas de contención de la COVID-19, se ha aprobado la reapertura de los templos católicos en toda España. Por tanto, os comunicamos con gran alegría que, desde hoy, las puertas del templo parroquial de Cristo Rey volverán a abrirse para la celebración de la eucaristía en el horario habitual.
A lo largo de esta semana el templo se someterá a un proceso de limpieza profunda, desinfección y rehabilitación para asegurar la seguridad sanitaria tanto de los feligreses como de los presbíteros celebrantes.
Siguiendo las indicaciones legales y medidas higiénicas de obligado cumplimiento, se toman las siguientes medidas:
- El aforo estará limitado al 30% (el máximo permitido para la fase en la que nos encontramos), con las debidas distancias de seguridad en el asiento en los bancos (que serán indicadas)
- Para entrar en el templo será obligatorio el uso de mascarillas, que únicamente podrá retirarse (por un instante) en el momento de la comunión
- Al entrar será obligatorio la desinfección de manos con gel hidroalcohólico, que estará dispuesto a la entrada.
- La entrada y salida del templo se realizará por la puerta lateral. Se pide, en todo momento, respetar la distancia de seguridad a la hora de entrar, salir y moverse por el templo
- Rogamos atender las instrucciones de los hermanos que, voluntariamente, están encargados del servicio de «recepción» y «acomodamiento» y que velan para la seguridad de todos
Recordamos que, durante el estado de alarma, la Conferencia Episcopal mantiene la dispensa de participar en la misa de manera presencial, recomendando que se siga de manera telemática (por televisión, radio, Internet), sobre todo a las personas más vulnerables.
Recomendación que secundamos desde nuestra comunidad parroquial ¡recordad que nuestro párroco retransmite la misa diariamente por Facebook!
Con mucho ánimo y gozo, celebro el reinicio de la eucaristía parroquial, la cual he vivido desde Venezuela, Barquisimeto, presidida por D. Juanjo, guía excelente de vuestra parroquia, aunque virtualmente, me sentí presente, fuerte abrazo a todos los parroquianos y hermanos catecumemos. La Paz del señor este con vosotros y con vuestro espíritu. Juan Pablo López